El estilo de Basil Poledouris se distingue siempre por su esmerada presentación y una puesta en escena cuidada y exquisita; su sentido melódico no es una excepción, en FLESH + BLOOD (1985) Basil Poledouris nos ofrece la última entrega de su saga medieval que se completa con CONAN THE BARBARIAN (1982) y CONAN THE DESTROYER (1984).

Hablar de FLESH + BLOOD es hablar de ediciones limitadas. Algo tendrá cuando en 1985 Varèse Sarabande la incluyó en su Varèse Sarabande CD Club y sacó al mercado del coleccionista 1.500 copias numeradas con 11 pistas y un total de poco más de 39 minutos de música (ficha). Ahora el sello belga Prometheus Records la incluye en su colección de ediciones limitadas a 3.000 copias numeradas, pero con el añadido de 10 bonus tracks y un total de 68:23 minutos de música. ¿Qué tendrá este FLESH + BLOOD (1985/2002) tan esquivo a las grandes discográficas? Si su compositor se hubiera apellidado Williams o Zimmer estaríamos hablando de la reedición del año y sería incluída con todo lujo de detalles en todas las páginas web dedicadas a la banda sonora con puntuaciones de sobresaliente; en cambio, tenemos una edición muy esperada de un compositor de culto que vive sus mejores momentos por lo que hace a ediciones de partituras olvidadas de los circuitos comerciales —FLYERS / FIRE ON THE MOUNTAIN (1983, 1981), AMANDA (1996) o SWITCHBACK (1997)—.

Al visionar la película a veces me he preguntado si Basil Poledouris conocía los derroteros del guión que Paul Verhoeven utilizaría en FLESH + BLOOD. Siempre he pensado que el compositor desconocía la historia erótica que se llevaba entre manos el realizador holandés, sus pasajes líricos que narran el amor entre Agnes (Jennifer Jason Leigh) y Martin (Rutger Hauer) son notas románticas y no notas para amores consumados. Su música es épica, potente, y en poco o nada refleja las desviaciones que hemos comentado anteriormente.

FLESH + BLOOD quedó pronto a la sombra de CONAN THE BARBARIAN (1982); la pobre distribución del film junto a su poco acierto marcaron el casi anonimato de esta partitura y su primera edición limitada no ayudó en nada a darle un mayor realce. Para algunos FLESH + BLOOD es mejor que la saga CONAN, pero para mí, FLESH + BLOOD es más que nada una continuación, un ejercicio experimental que complementa de alguna forma la saga de John Milius. Así es como se percibe por su instrumentación que guarda fuertes similitudes con CONAN THE BARBARIAN (1982) y CONAN THE DESTROYER (1984). Basil Poledouris pudo contar en su equipo con dos de los hombres que han dirigido sus orquestaciones: Greig McRitchie y Jack Smalley.

Aun siendo FLESH + BLOOD una partitura experimental su temática resulta a veces algo reiterativa. Esto la diferencia de CONAN THE BARBARIAN (1982) y la acerca a obras posteriores como la alternativa CHERRY 2000 (1987) sobretodo por lo que hace a temas como Castle Invasion o a las notas galácticas de Siege of the City que alguien ha querido vincular con STARSHIP TROOPERS (1997). Además de los temas de acción, románticos y épicos, en FLESH + BLOOD comprobamos la influencia del sustrato académico herrmanniano y northiano (Night Fires).

La suite final Denouement / End Titles —que podemos escuchar también en una versión alternativa— se desarrolla de la manera más simple, incorporando tan sólo dos de las melodías de la partitura, la parte romántica del tema Martin and Agnes Love Theme y la parte de acción que ya escuchábamos en el Main Title.

En FLESH + BLOOD (1985) encontramos dos conjuntos temáticos secundarios, temas percusivos como The Box que nos recuerdan los ritmos y rituales bárbaros de Conan y dos temas ambientales —Night Fires y Water (The Undoing)— que de alguna forma vienen a definir los intermedios de la partitura y que tienen una fuerte impronta del sustrato de la banda sonora clásica.

Los bonus tracks refuerzan de alguna manera el interés por ofrecernos la integridad de la obra; así pues, los dos temas alternativos Main Title y Denouement / End Titles —no tan diferentes como para ser considerados alternativos— no son sino parte integral de la obra. El resto de pistas adicionales son temas regulares que entran de lleno en la temática referida anteriormente.

Sólo nos queda por esperar que Prometheus o Varèse Sarabande se animen a reeditar CHERRY 2000 (1987), NO MAN’S LAND (1987) o PROTOCOL (1984), lo esperamos con las mismas ganas que esperábamos este FLESH + BLOOD:

Thanks a lot Luc Van de Ven! Thanks Prometheus!

Valoración:

Joan Martínez [2002-05-02]